miércoles, 29 de febrero de 2012

Los Recuerdos de mis Ollas




Nuestro Arte Culinario
- La cocina tradicional  en Andalucía tiene rango de arte culinario autóctono, reconocido desde la Antigua Grecia como resumen de las culturas mediterráneas, retocado por Roma, refinado desde Al Andalus y enriquecido con los productos procedentes de las Américas, hacen que nuestra cocina sea galardonada y valorada por todo el mundo.
- En Granada, al igual que en el resto de las provincias andaluzas, su cocina es fiel reflejo de nuestra propia historia, de una huella y  herencia que perdura y, gracias a nuestros mayores, se conserva en estado original.
- En Las Raíces de la Encina recopilamos  las recetas populares, las de toda la vida, poniendo especial énfasis en su versatilidad, exquisitez y economía, tres “ingredientes” que hoy, debido a la globalización y a las nuevas tendencias minimalistas y  modernistas que nos invaden, ponen en superior valor nuestros recursos propios y recetarios tradicionales.
- Sin más pretensión que retomar aromas, sabores y sabias combinaciones que nos han acompañado durante siglos, toma este recetario como tuyo y añádele tus guisos, fritos, ensaladas, dulces, etc., todo lo que recuerdes o te transmitieron. No lo perdamos, es nuestro y es la herencia que perdurará al paso del tiempo, así que anímate y ayúdanos a recuperarlo. Gracias por tu colaboración. 






martes, 28 de febrero de 2012

Remojón Granaíno

REMOJÓN GRANADINO
                                                                                                                                   
INGREDIENTES:

1 Kg Naranjas
50 gr Aceitunas Negras
1 Cebolleta
150 gr Bacalao
Aceite de Oliva Virgen Extra


ELABORACIÓN:
Desalar el bacalao y cortar a trozos medianos.Pelar y cortar las naranjas y la cebolleta.Meter en un bol ,mezclar todo junto con las aceitunas, salar al gusto y regar con aceite de oliva virgen extra.

Naranjas Ecológicas del Valle de Lecrín
Nuestra Huerta Ecológica

jueves, 23 de febrero de 2012

Pan de aceite

PAN DE ACEITE

Ingredientes:
500 gr Harina de Fuerza
350 ml Leche Entera
25 gr Levadura Fresca
100 gr Azúcar
5 gr Sal
150ml Aceite de Oliva Virgen Extra
100 gr Nueces
50 gr Pasas
10 gr Anisetes
2 Huevos

 Elaboración:
Calentar el aceite, dorar los anisetes y reservar.
Mezclar en un bol la harina con la levadura, el
azúcar y la sal, agregar la leche tibia,a
 continuación agregamos el aceite, las pasas y las
 nueces, dejamos fermentar una hora.
Una vez fermentada la masa, la colocamos en una
 bandeja de horno y se deja reposar 30 minutos.
Hornear a 200 grados 15 minutos previamente
 pintado con huevo batido y espolvoreado con
 azúcar.
 ACEITES DE NUESTRA TIERRRA

Guisillo de la Vega

GUISILLO DE LA VEGA
INGREDIENTES:
1 kg Alcachofas 
 2 Puerros
500gr Habitas
150gr Espinacas
100gr Panceta Salada


Aceite de oliva Virgen Extra

ELABORACIÓN:
Rehogar a fuego lento la panceta con el aceite, agregar las alcachofas, y el puerro, cortado en cuatro trozos, después agregar las habitas y por último las  espinacas, tapar la olla y dejar 15 minutos a fuego lento o hasta que la verdura este cocida al dente, cocida pero sin deshacerse. Probar  y sazonar al gusto.



Tierras con sabor

lunes, 20 de febrero de 2012

Nuestra Encina Centenaria

Hotel La Encina Centenaria






NUESTRA ENCINA

“Ya sé, encinas
campesinas,
que os pintaron, con lebreles,
elegantes y corceles,
los más egregios pinceles”.

                                      Antonio Machado

La encina ha acompañado desde sus comienzos la historia andaluza, penetrando en sus mitos, sus culturas, colaborando primero a la subsistencia de la población y posteriormente al desarrollo de formas económicas cada vez más complejas.
Estrabón, al hablar de los pueblos de la Península Ibérica, nos dice que éstos se nutrían la mayor parte del año de bellotas, las cuales, después de secas y trituradas, se molían para hacer un pan que podía guardarse largo tiempo.

En el discurso que dirige Don Quijote a los cabreros les dice que “comer bellotas es símbolo de la edad de oro”. La importancia del fruto de la encina como recurso económico, así como la robustez y longevidad, hizo de la encina un árbol mitológico; para los antiguos griegos, Zeus, el dios de los dioses, tenía una encina como vivienda cuando bajaba a la tierra.

Posiblemente, en tiempos muy pretéritos, la encina poblara más o menos uniformemente toda Andalucía excepto algunas zonas costeras y cumbres penibéticas. En la actualidad la encina ocupa más de 850.000 hectáreas en Andalucía, casi la tercera parte del encinar español.




Su indiferencia a las condiciones edafológicas y su rusticidad le permite vivir en casi cualquier tipo de terreno, excepto los muy salinos o yesosos, resistiendo fuertes sequías prolongadas. Se extiende desde el nivel del mar hasta los 2.000 metros de altitud en Sierra Nevada. Su óptimo se encuentra entre los 300 y los 700 metros, donde viven los mejores encinares para producción de frutos. La encontramos desde la Sierra de Alhamilla en Almería con poco más de 300 milímetros de lluvia, hasta la sierra hiperhúmeda de Cádiz con más de 2.000 milímetros.

Los pequeños bosquetes de encinas o árboles aislados, intercalados entre los cultivos, están desapareciendo debido a la mecanización e intensificación de la agricultura como consecuencia de una mentalidad productivista. Pero existen formas de degradación aún más intensas: la sustitución del encinar por otras especies en todo ajenas a la evolución serial de la vegetación. Es el caso de las repoblaciones de eucaliptos, llevadas a cabo durante los últimos años, que se hicieron en el área potencial del encinar.

Como beneficios directos, la encina produce fundamentalmente leña, frutos, madera y mejora de pastos. La montanera ha experimentado un auge creciente, después de varios años de depresión económica.

Aparte de estos beneficios más o menos cuantificables, la encina tiene una importancia fundamental por su papel ecológico y sus beneficios indirectos: mejora los suelos, constituye uno de los pilares fundamentales del ecosistema mediterráneo y alberga una de las comunidades faunísticas más variadas de Europa.
La potenciación de los distintos sectores productivos del encinar mediante mejoras genéticas para producción de fruto, selección de los árboles productores de semilla, injerto de variedades selectas, mejoras en la comercialización de leña y carbón vegetal y desarrollo de otros productos como licor de bellota o el aceite del mismo fruto, al parecer de excelente calidad, tendrá una incidencia favorable en la conservación y mejora de los encinares.

Olvidada, cuando no despreciada, por la política forestal de estos últimos años, la encina puede recuperar ahora el papel que le corresponde dentro del contexto mediterráneo. Y como dijo
“Bajo tu casta sombra,
encina vieja,
quiero sondar la fuente de mi vida
y sacar de los fangos de mi sombra
las esmeraldas líricas”.
Federico García Lorca







           

Propiedades de la Corteza de Encina

Beneficios para la salud de la Corteza de Encina usada como medicina natural para tratar variadas afecciones.

 La Encina es un árbol popular cuya corteza posee varias propiedades medicinales, siendo su infusión utilizada por la medicina natural para tratar problemas de piel, hemorroides, afecciones en la boca y garganta y más aún.
La Encina es un árbol que crece de manera natural en la mayoría de los países bañados por el mar mediterráneo. Sus frutos, llamados bellotas al igual que los frutos del roble, se han empleado tradicionalmente para alimentar al ganado.






Propiedades Medicinales de la Encina

Las propiedades medicinales de la encina son conocidas desde hace siglos por los pueblos donde estos árboles suelen estar presentes. La encina es muy rica en taninos, de propiedades astringentes, y de ahí su uso en remedios caseros para el tratamiento del acné y de la dermatitis seborreica.









Los beneficios de la encina en el tratamiento de afecciones cutáneas van más allá, gracias a su acción antiséptica. Por ello se emplean en el caso de hemorroides externas, para hacer baños de asiento, también si existe prurito vaginal y no es debido a una infección por hongos, o para aliviar las molestias asociadas a los sabañones.

Para finalizar, la encina favorece la coagulación de la sangre mediante su aplicación local, y por ello puede ser de utilidad cuando se produce una pequeña herida, o incluso ante una hemorragia nasal moderada.
En forma de enjuagues y de colutorios, la infusión de corteza de encina permite aliviar o incluso curar afecciones como la gingivitis, la faringitis o la amigdalitis. Se debe tener la precaución de no tragar el líquido empleado para el tratamiento.
Por vía oral, los mismos taninos de la encina permiten tratar diarreas, así como inflamaciones del intestino.

Precauciones con el uso de la corteza de Encina

Pese a las propiedades medicinales de los taninos, que se encuentran mayoritariamente en la corteza de la encina, su concentración es tan elevada como para ser necesaria precaución en las dosis empleadas.